Mikel Erentxun: “El mejor regalo posible, ir al Amaya”
El músico Mikel Erentxun era y sigue siendo todo un cinéfilo, que disfruta en las salas, más de noche y entre semana, convencido de que “el ritual de salir de casa, entrar en un cine y centrarte en una película es inimitable y no tiene nada que ver con verla en casa”. Recuerda perfectamente todos los viejos cines donostiarras, de cuando “San Sebastián era una ciudad con muchísimos cines” y las salas “tenían un encanto que ya no existe”. Se acuerda Erentxun con nostalgia de todos, pero en su charla con Aquellos Cines Donostiarras nos desvela que en su corazón ocupan los primeros lugares tres:
El Amaya: “Era mi cine favorito, con aquel pequeño anfiteatro que era como el salón de casa y aquellas reposiciones de películas de aventuras, de Tarzán, de clásicos. Mis primeros recuerdos cinematográficos están allí. Me acuerdo de un cumpleaños de niño en que pedí el mejor regalo posible, ir al cine, y nos fuimos a ver ‘Ivanhoe’ al Amaya”.
El Bellas Artes: “Su gallito y sus sesiones continuas eran algo mítico. Ibas allí sin tener ni idea de qué películas echaban ni a qué horas y empezabas viendo el final de una… Más adelante recuerdo haber visto allí ‘Elvis’, la película que hizo John Carpenter con Kurt Russell haciendo de Elvis. La echaron en el Bellas Artes sólo tres días y fui a verla los tres“.
El Astoria: “Cuando tenía una única sala era inmenso. Nos colamos a ver ‘Tiburón’ y es la película que más me ha afectado en mi vida. Dejé de bañarme en el mar y todavía la tengo grabada, aunque no la he visto más que aquella vez en el Astoria”.
El Autor
El periodista donostiarra Mikel G. Gurpegui ha trabajado en ámbitos muy diversos, aunque quizás sea más conocido por dos de sus colaboraciones habituales en las páginas de ‘El Diario Vasco’, las críticas de cine y la sección ‘La calle de la Memoria’, en la que se acerca al pasado de la ciudad a través de la hemeroteca. Por primera vez, une ambas facetas, la cinéfila y la retrospectiva, en este blog, un proyecto de investigación, documentación y difusión apoyado por el Grupo Sade, protagonista y heredero de la historia de la exhibición cinematográfica en San Sebastián.